Hemos recibido con profundo pesar la noticia del fallecimiento del Papa Francisco. Como Iglesia Diocesana nos unimos a la Iglesia Universal en este momento de dolor, encomendando su alma a Dios, Padre de la Misericordia. Lo hacemos en la confianza de que el Señor lo premiará como a los siervos buenos y fieles.
Su ministerio de Pastor bueno ha sido un ejemplo de total dedicación a la misión que el Señor le confió. Hasta ayer mismo, día de Pascua de Resurrección pudimos contemplar su sacrificada entrega a todos.
Que el Señor conceda al Papa Francisco contemplar y gozar de la Luz gloriosa del Resucitado.
Pido a todos los fieles diocesanos que hagan sufragios por el eterno descanso del Papa.
Apenas sea posible se informará del día y hora en que se celebrará la Santa Misa de funeral en la Catedral de Cuenca.
+ José María Yanguas
Obispo de Cuenca