Cada 24 de septiembre la Iglesia celebra la fiesta de Nuestra Madre la Virgen de la Merced, patrona de los presos y de todos los que trabajan en prisión. Para ellos, la Merced «es misericordia, es solidaridad, es compromiso».
El Obispo de Cuenca, Monseñor José María Yanguas los ha acompañado en este día oficiando la Santa Misa a las 10:30 h. en el Centro Penitenciario. Posteriormente se ha hecho entrega de trofeos a los internos ganadores en las diferentes competiciones celebradas en el Centro.
Fue el 27 de abril de 1939 cuando la Virgen de la Merced fue declarada en España, y en muchas partes del mundo, patrona de las prisiones, es desde entonces cuando presos, familias y trabajadores de la institución penitenciaria celebran su fiesta.
La prisión de Cuenca cuenta con un capellán, Arturo Candela, que atiende espiritualmente a los presos.