Párroco de Garcinarro
En Castillejo del Romeral, provincia y diócesis de Cuenca, nació del matrimonio de Bonifacio Puerta y Feliciana Saiz el niño Adolfo.
Recibió las Órdenes Menores el día 2 de junio de 1917 y el Subdiaconado y Diaconado el día 22 de septiembre del mismo año. Siendo ordenado presbítero el día 16 de marzo de 1918.
Poco se sabe de su infancia y de sus primeros destinos como sacerdote. Los testimonios nos hablan de su último destino como sacerdote de la diócesis conquense.
Fue párroco de Garcinarro de 1934 a 1936. Su madre venía al pueblo a pasar algunas temporadas con él. Celebraba en el pueblo dos Misas los domingos, destacaba por su celo en la catequesis, con las visitas a la Virgen del Sagrario, el cuidado de los enfermos llevándoles la comunión y la atención a los ancianos. Las gentes del pueblo recuerdan lo bien que preparaba las Primeras Comuniones de los niños.
Era amigo del médico, D. Sergio, al que también mataron. Repartía a los niños juguetes, estampas, rosarios… y las niñas cuidaban con esmero e ilusión el jardincito que había en la Iglesia Parroquial.
Tenía muchos monaguillos. Su hermano era el presidente de la hermandad de labradores y, a instancias suyas, se compró para el pueblo una máquina seleccionadora de semillas.
Huyó del pueblo al estallar la guerra. Se fue a Castillejo del Romeral (Cuenca) donde lo encontraron. Lo mataron por ser sacerdote con una escopeta de perdigones. No estuvo en la cárcel ni precedió a su muerte juicio de ningún tipo.