Párroco de Rozalén del Monte
En Barajas de Melo, Cuenca, el día 24 de febrero de 1887, nacía D. Matías Fernández Ayllón, hijo de padres cristianos, con grandes virtudes morales, que dieron en fruto la vocación del hijo al sacerdocio.
El Siervo de Dios, D. Matías Fernández Ayllón, ingresó en el seminario de Cuenca, donde realizó los estudios eclesiásticos, y fue ordenado sacerdote el año 1911. Fue nombrado Cura Párroco de Rozalén del Monte, donde ejerció el ministerio sacerdotal ejemplarmente hasta que le sobrevino la muerte.
En el mes de julio de 1936, al estallar la revolución y persecución religiosa en España, marchó a su pueblo, refugiándose en casa de su hermano, D. Vicente. Viendo que las cosas, cada día, iban a peor, y que se esperaba un desenlace fatal, se vio en la necesidad de refugiarse en el campo junto con el anciano sacerdote D. Hilario García, donde permanecieron ocultos.
Enterados los milicianos, salieron en su busca, y una vez que los encontraron, llenos de ira y odio, los atormentaron cruelmente hasta matarlos el día 22 de agosto de 1936. Era tal el odio hacia ellos, que dejaron los cadáveres insepultos. Cuando la familia se enteró de que los habían matado, recogieron sus cadáveres y les dieron sepultara.
Ambos sacerdotes, Siervos de Dios, murieron asesinados el 22 de agosto de 1936, únicamente por ser sacerdotes y por odio a la fe de Cristo. Siempre han tenido y siguen teniendo fama de mártires.